Heraldo Muñoz escribe un interesante artículo en El Mercurio. Solamente una pildora del artículo de Muñoz. “el filósofo fascista Ivan Ilyin sería la figura más admirada, y recomendada a su entorno (por Putin).. Ilyin consideraba al fascismo la política del futuro y admiraba a Benito Mussolini y a Adolf Hitler. El filósofo ruso observaba que el nazismo es sobre todo una expresión de “espíritu” que debía ser imitada por los rusos. y se refería a sus camaradas rusos blancos como “mis hermanos blancos fascistas”.
Mi comentario: la democracia liberal es una construcción más débil de lo que la generación de gente joven cree o piensa. Las dictaduras, todas, son terribles. Es preferible la denostada y decandente democracia liberal a las “democracias con apellidos autoritarios”, por no decir autocracias con nombres de fantasía (democracias ficticias desarrolladas dentro de regímenes dictatoriales).